miércoles, 25 de agosto de 2010

CONTESTACION A LOS DETRACTORES DEL LIBRO "ASI SE HIZO EL HOMBRE Y LA TIERRA"

CONTESTACIÓN A LOS DETRACTORES DE MI LIBRO “ASI SE HIZO EL HOMBRE Y LA TIERRA”




FERNANDO L. RODRÍGUEZ JIMÉNEZ



En países libres, cuando alguien escribe un libro, lo hace público, exponiéndose a que las críticas sean positivas o negativas.

Cuando escribí “Así se Hizo El Hombre y la Tierra”, lo concebí con sincera honestidad, consciente que habría dos grupos de gente que lo acogerían de forma diferente y opuesta, los agradecidos de saber como se hizo y quienes hicimos el programa de Televisión Española, “El Hombre y la Tierra”, con detalles y que de alguna manera dieran a conocer a quienes estábamos tras las cámaras. Sin duda, un gran equipo de profesionales de los mejores del mundo, por no decir los mejores, mencionados con todo afecto y admiración como profesionales de primerísima fila que son o eran, cuyo entrenamiento ha sido costosísimo para el presupuesto de TVE, con gran riesgo de perder la vida en muchas ocasiones y enormes dificultades técnicas, que habríamos de resolver, frecuentemente sobre la marcha, tomando la lección para que en el próximo rodaje no sucediese. Sustituimos con saber e ingenio la falta de medios técnicos.

Nadie, que conozca un poco el oficio, puede creerse que una sola persona realiza todo en un programa o en una película, menos, en una serie televisiva tan enormemente compleja como lo fue esta, donde llegamos a tener cuatro equipos rodando simultáneamente, supone entre 60 y 100 personas.

Por otro lado están los “fundamentalistas-fanáticos”, quienes sobre el tema no quieren oír hablar de algo que su mente ha elaborado en una sola dirección, su personaje preferido, convertido en héroe infantil, como superman, spiderman y otros de ficción, sin el más mínimo espíritu crítico, en la mayoría de los casos, sin tener la más inapreciable idea de cómo se hace una serie tan compleja.

Otros son “cobra mandada”, que dicen en Brasil, de esos prefiero ni comentar, no vale la pena que la competencia se haga de esa manera, tan desleal y de bajo estilo.

Con mi libro no he querido restar méritos a su Director Félix Rodríguez de la Fuente, amigo, hasta que dejó de serlo, hombre osado, capaz de convencer a tirios y troyanos, con su facilidad de palabra y énfasis, quien aseveraba lo que ya dijo el gran dramaturgo español Lope de Vega: “El vulgo es necio y pues lo paga, es justo hablarle en necio para darle gusto”. En momentos de intimidad me decía: “Fernandito, la gente es tonta y hay que darles lo que quieren.”. Nunca he estado de acuerdo con estas palabras, aunque vistas las críticas recibidas, algo de razón tenía, al repetir el concepto de Lope. Pensaba que el “vulgo”, no era tan necio, pero veo que si, al menos una parte de ese vulgo es sordo, aunque no es ciego para la crítica, no sabe leer, al recibir un texto que no está de acuerdo con sus ideas de “fan” incondicional y fundamentalista, sin tener en cuenta si su ídolo es tal como se lo han presentado o como esa persona lo imaginó, y hacer una serie de naturaleza resulta algo bucólico y “virginal”.

Insisto, jamás ha sido mi idea “minus valorar” la gran obra que supuso “El Hombre y la Tierra”, de la que he sido partícipe e influyente en su filosofía, cuyo pesado “carro” arrastró Félix Rodríguez de la Fuente, a quien conocí cuando yo tenía unos 14 años, iniciándome en cetrería con el y Pascualón, en 1.954. Por avatares del destino, a lo largo de la vida me ha tocado darle, mucho más de lo que de él recibí.

Para quienes creen que fue un enorme honor participar en este programa irrepetible, les diré que si, fue un honor tener la posibilidad de poder mostrar los conocimientos que personalmente había adquirido, durante miles de horas de estudio, observación, cine y fotografía de fauna y flora ibérica, en el Museo Nacional de Ciencias Naturales, en el Laboratorio de Vertebrados de la citada Institución, en la Sociedad Española de Ornitología, de la que fui casi miembro fundador y el más joven, también fui el miembro más joven de la Real Sociedad Española de Historia Natural, y uno de los siete fundadores del Centro Pirenaico de Biología Experimental, de Jaca (Huesca), donde se practicaron estudios interdisciplinares de ecología por vez primera en España. Más de 20 años de intensa convivencia con el medio natural y sus criaturas, antes de ser invitado por el propio Félix, para ser subdirector del programa, también fue de gran utilidad complementaria a mis conocimientos y numerosos roles dentro del programa, mis experiencias en manejo de animales en zoológicos, en el de Madrid y en Zoologischen Garten de Hannover, en temas de hacer decorados naturales, técnicas aprendidas en el Laboratorio de Taxidermia del Museo Nacional de Ciencias Naturales de Madrid, en el Landes Museum de Hannover, en el Smithsonian Institut de New York, todos esos y muchos otros conocimientos los puse a disposición del programa.

Algunos de los críticos lectores, no se han molestado siquiera en conocer el currículo del autor del libro, sólo quieren ver un afán ególatra en las descripciones de la realización de las secuencias más emblemáticas de la serie, mal que les pese, las he preparado en su mayoría o he intervenido en la dirección y confección de las mismas, cuanto se narra en primera persona es por que lo hice personalmente, hay muchos testigos de que cuanto digo es así y no de otra forma. Es cierto que he cuidado más la veracidad de lo que se dice, al cómo se dice, acepto esa crítica.

Este libro pretende poner las cosas en su sitio. Me había marchado del programa, por circunstancias sumamente graves, más el trágico fallecimiento de Félix, Roa y Albertito, me hicieron quitarme de en medio, al sentir nauseas ante el espectáculo deleznable de cierta gente que tenían alguna función en el equipo, querían ocupar “la vacante “ dejada por Félix a toda costa, con diferentes artimañas arteras y poco nobles, desde la llegada de los cadáveres a Madrid, se pelearon por tomar sitio en las angarillas, para salir en la foto llevando el féretro de Félix, gentes que nunca tuvieron la autoridad y responsabilidad del autor en el equipo, apuntándose méritos ajenos. Llevé las de mi querido amigo Teo Roa, sin tanto protagonismo mediático, junto a Albertito, acompañándolos en su último viaje al cementerio.

Que decir de quienes tan a penas contaban pocos años para poder hablar de cómo se hizo el programa, no he dejado de alucinar, he escuchado verdaderas inexactitudes y necedades, ocasionalmente unidos a la hija de Félix, a quien conozco desde antes de nacer, quien jamás tuvo nada que ver en el programa, al ser una niña, por tanto mal puede contar lo que no ha vivido, en compañía de quienes tienen menos conocimientos, al no haber participado del programa. Otros han hablado de secuencias que yo he preparado, como si lo hubieran hecho ellos. He escuchado a Aurelio haber sido el artífice de la secuencia del águila real y no fue así, como naturalista cuidador-entrenador de animales y cetrero de la serie, entrenó muy bien al águila real para que cazara presas pesadas, cosa inhabitual en estas predadoras, la secuencia la discutimos Félix y yo, luego lo hicimos con Aurelio y Roa, para estudiar las dificultades técnicas y desde donde habría de salir. En Tele 5 he oído decir a un guarda, contratado para que no dañaran o se llevaran animales durante las noches y días festivos, asegurar haber sido el quien lo preparó. ¡No tocaba a los animales por que le daban miedo y jamás se calzó un guante de cetrería! Las inexactitudes y exabruptos pueden llenar libros.

Contemplados los preparativos por Félix y todo el equipo, Aurelio me ayudó a colocar el chivo de cabra doméstica, que el autor había teñido para que pareciera un animal salvaje, escalé para situarlo y atarlo con nylon en la cornisa, que descubrí y decidí personalmente donde habría de atarse, Aurelio me pasó al animal. Luego, escalé el cantil con el águila encaperuzada en el puño, hasta la roca desde donde sale. Estaba mareado, el águila me enganchó del cuello, me tiró un garreo a los ojos y casi me despeño. Aurelio se quedó con Félix y el equipo de rodaje en el valle de Peregrina, desde donde habría de llamarla, y finalizada la secuencia acudir a recogerla. ¿Es eso egocentrismo? o narrar las cosas como fueron, para que quienes disfrutaron con el programa sepan como se hizo, una serie que no tiene parangón, irrepetible por lo costosa y emblemática, que representó a TVE y a España en el mundo.

Algunos dicen que hay rencor en mis palabras. Hay cosas que no se olvidan, se pueden perdonar, pero no olvidar, el autor dio todo lo bueno que dentro de él había, sus conocimientos de fauna silvestre y de cine de naturaleza. Narro en el libro que con Zúñiga y Roa fuimos los verdaderos pioneros del cine documental de Naturaleza en España. He defendido a Félix ante el equipo, en TVE, ante algunos me jugué la vida por él, el pago fue que trató de quitarme de en medio para siempre, intentando provocar varios accidentes de rodaje. Simplemente es así, y resulta difícil de olvidar, es verdad.

A quienes no le guste leer estas palabras, lo siento. Peter Pan y Wendy, la Bella Durmiente, Dúmbo, Bámbi e infinidad de personajes infantiles, fueron héroes de muchas generaciones, luego creces y te das cuenta que volar se hace en aparatos, que el País de Nunca Jamás, es una hermosa fantasía, la realidad cruda es que comer resulta caro y vivir difícil, máxime cuando te has enfrentado a la muerte miles de veces y en la propia naturaleza. Luego has de ver improperios de gente con anteojeras, que no sabe lo que dice, ni de que habla, sin rigor, sin tratar de enterarse siquiera de a quien critican.

Quienes han disfrutado del programa, tienen derecho a conocer la otra cara de la moneda, mi periodo directivo en el programa, suavizado, lo narro en el libro, esa es la verdad, no hay la más mínima exageración, más bien al contrario.

Miguel Mª Delgado, prologuista del libro, fue el Jefe de Producción que más tiempo estuvo en el programa, no me hubiera permitido mentir, ni exagerar. También es verdad que como el dice: “Nada es verdad, ni mentira, todo es según el color del cristal con que se mira”. Posiblemente si los cientos de personas que han pasado por el programa dieran su versión, todas serían diferentes, depende del lugar ocupado.

Este es mi cristal, desde la cúpula del programa, si os gusta, estupendo, si no, es cosa vuestra, más creo que nadie tiene derecho a privar a otros de opinar por si mismos tras su lectura, desacreditan y niegan la autenticidad de cuanto se menciona, usurpan el derecho a la libre elección y libre albedrío, sin datos que corroboren sus palabras.

He vertido mis vivencias en un libro sobre el programa, que no es uno más en lo laudatorio e hipócrita, muestra la cara desconocida, con realismo veraz de quien lo vivió en primera persona, sin hablar por boca de asno. No acostumbro a opinar de lo que no conozco, hablo de lo que creo saber algo, de mis propias experiencias, como lo planteo en este caso, es mi versión personal, para no hacer “El Libro Gordo de Petete”, al explicar con todo detalle cada secuencia por mi dirigida o preparada, seleccioné las que me han parecido más emblemáticas, para no hacer más farragoso el texto. No se cuentan las numerosas anécdotas humanas, quedan en el secreto del sumario, la vida privada interesa a cada cual y no quise comentar aspectos que perjudicarían a terceros, no es el objeto de la obra. Fue un programa muy duro que costó demasiadas vidas humanas, muchas de animales, separaciones, divorcios, enfermedades, locuras transitorias, accidentes, algunos muy graves, otros mortales, suicidios… No fue “Alicia en el País de las Maravillas,” la lista de muertos no se constriñe a los divulgados, hay más, demasiados más. Siento que esta cara no interese, más sin ella, no hubiera sido posible que quienes criticáis “Así se Hizo El Hombre y la Tierra”, por ser “fans fundamentalistas”, no hubierais visto las mejores secuencias de la serie. Nada es gratis, ni rodar la naturaleza “un jardín de violetas”.

6 comentarios:

  1. Fui uno de esos niños que creció con la serie El Hombre y la Tierra y que marcó mí infancia como a tantos otros.
    Os lo agradezco a TODOS los que lo hicisteis posible. Especialmente a Félix.
    Un libro muy interesante y por supuesto enriquecedor, que tiene perfecta cabida en mi biblioteca aunque me considere un apasionado en todo lo referente a la vida y obra de Félix Rodríguez De la Fuente.
    Muchas gracias Fernando por tu libro. Faltaría más!

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  2. he intentado conseguir el libro y ha sido imposible, desde el año pasado. Si alguien sabe cómo consehuirlo le agradecería me lo indicase. Gracias.
    También soy niño y admirador de Félix pero a Fernando hay que escucharlo. Seguro que Félix tenía sus fallos, y yo.

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    1. Hola, lo tienes disponible en páginas de segunda mano, como todocolección o iberlibro.

      Un saludo.

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  3. Buenas noches Fernando, soy y he sido intimo amigo de Pepe ZURBANO compañero mío de trabajo como Perito de La Unión y El Fénix. Español, durante muchos años, hasta que se fue a la Amazonia Peruana.
    Ha llegado a mis manos la entrevista que le realizo a Vd. "CRONISTA VIAJERA" en el 2015 donde relataba, entre otras cosas, el asesinato de mi amigo Pepe Zurbano y donde decía que iba a realizar una serie para TV que se llamaría "LATIDOS EN LA VIDA DE LA SELVA AMAZONICA".
    Querría saber como hacerme con ella y si existe algún guion donde se narre lo ocurrido a Pepe, me lo hiciera saber.
    Leyendo su narración se me han saltado las lagrimas recordando a mi amigo pues se muy bien las causas por las que abandono su trabajo y su país.
    Le agradeceré una contestación en cualquier sentido y en el ínterin reciba mi mas cariñoso abrazo.

    José M. Maroto

    josema0044@gmail.com
    josema44@movistar.es

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